Oliver se escapa del orfanato donde ha crecido desde que nació. El hambre y el ambiente hostil le empujan a huir hacia la ciudad, a Londres, donde espera forjarse un futuro mejor. Cuando llega, conoce a Jack, que le invita a formar parte de la banda de Fagin, un viejo avaro que recoge en su casa a niños de calle a cambio que roben para él. Oliver descubrirá que, en un ambiente sórdido como el de los bajos fondos londinenses, pueden convivir la ternura y el buen corazón de la tabernera Nancy con la maldad cruel de Bill Sikes, compañero y socio de Fagin.